El universo del hard rock a finales de los 80 era un hervidero, donde solo los más fuertes (aliado con la suerte), sobrevivían intentando sacar la cabeza entre tanto grupo. TANGIER consiguieron con este segundo disco "Four Winds" (1989) un discreto éxito. La banda cambiaba casi por completo de miembros tras su debut cuatro años atrás. Doug Gordon guitarrista y compositor solo dejó al cantante Bill Mattson. El grupo proveniente de Philadelphia fué apadrinado en sus inicios por Cinderella. Aquí presentan un álbum más trabajado que su debut, incidiendo más en el aspecto melódico de los temas. Un disco y banda que podríamos emparentar con gente como Tora Tora, Tesla, Cinderella o los Whitesnake mas comerciales. Una banda con buenas intenciones, un buen puñado de temas apetecibles y que vivieron un pequeño momento de gloria. Hubo un tercer disco un par de años después, finalizando aquí su historia.
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