En algún momento dado ciertos artistas en sus carreras son tocados por algo, llamese varita mágica, inspiración, o simplemente un golpe de suerte. Todo esto está muy bién, pero indudablemente nada de eso sería posible si el individuo en cuestión no tuviera talento. Y sin temor a equivocarnos, eso es precisamente lo que le sobra a CHRIS ISAAK. En 1995 nos regaló uno de esos discos que pertenecen a la categoria de obras maestras. Una colección de temas tan perfectos, como el más redondo círculo jamás dibujado. "Forever Blue" se llamó esa obra maestra, de principio a fin todo es perfecto aquí. Desde ese tema blues lascivo que abre el álbum "Baby did a bad bad thing", (una de la canciones mas sexys jamás escritas). Pasando por canciones como "Somebody´s crying", "Graduation day" o "Forever blue", que son simplemente perfectas. El espíritu de Roy Orbison o Elvis está presente en todo el disco, pero sin que ello eclipse la personalidad de Isaak, simplemente le da un sabor a clásico. "Goin´ Nowhere" es otra de las piezas mas alegres y fuertes del plástico. "Change your mind" es de esas canciones que parecen sacadas de cualquier película de David Lynch, un blues arrastrado y susurrante.Se podría tirar una piedra sobre el disco para elegir un single, y no fallaríamos. Cualquier tema tiene su propia personalidad, y eso solo es posible con talento.
En el mundo del arte dolor y belleza suelen ir casi siempre de la mano.Obra maestra
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